Este cuadro ha sido cortado con precisión por una máquina láser, lo que lo convierte en una pieza única y con un diseño elegante y sofisticado. El contraste del color negro con los detalles finos de las flores lo hacen perfecto para complementar la decoración de cualquier espacio.
El tamaño de 70×50 es ideal para colgar en una pared y crear un ambiente moderno y minimalista. Además, la durabilidad de la madera MDF lo convierte en una pieza resistente y duradera.